¿Sabemos lo que es un 'consumidor ecoactivo'? Actuar como tal y enseñar a los niños a seguir nuestro -buen- ejemplo
Para no empezar la casa por el tejado, primero vamos a responder a una pregunta primordial: ¿qué es un consumidor ecoactivo? Pues bien, la explicación de este término es un tanto amplia y engloba muchas conductas distintas.
Según Aecoc, la mitad de los españoles ya cuenta con unos hábitos de consumo más conscientes, y presta atención a los componentes del producto, al envase, si se ha fabricado en territorio nacional, así como la forma de hacer de la marca que lo fabrica.
El Consumidor ‘ecoactivo’ es un consumidor reponsable en muchos sentidos. Lo que más se valora en estos casos es:
-Que el producto no contenga aditivos nocivos para la salud y que sea lo más natural y orgánico posible.
-Que sea de comercio justo y que la marca que lo fabrique sea responsable para con el medioambiente y las condiciones laborales de sus trabajadores.
-Que el producto sea de origen nacional, en la medida de lo posible.
-Que el Envase sea lo más sostenible posible. Los plásticos son el enemigo número 1 de los consumidores ecoactivos.
-Si se trata de un producto alimenticio, que este contenga la menor proporción posible de grasas saturadas, procesados y azúcares, los cuales resultan tremendamente nocivos para la salud.
Hasta aquí bien. Sin embargo, quizás el caso de los más pequeños sea uno de los más complicados cuando se trata de consumo responsable, y es que los niños, como niños que son, no se plantean de primeras todas estas cuestiones.
Los Niños son consumidores por naturaleza; aunque no sean ellos quienes realicen las compras, lo cierto es que siempre necesitan nueva ropa, juguetes, material escolar, y un sinfín de productos más que, cuando nos venimos a dar cuenta, han inundado su habitación.
Sin embargo, siempre podremos encontrar una serie de consejos para cumplir con nuestra honorable misión de consumidores/padres ecoactivos:
-Juguetes reutilizados y reciclados: nuestra mente consumista nos dicta que a los niños hay que comprarles nuevos juguetes cada cumpleaños o cuando llegan las Navidades. Sin embargo, los juguetes pueden reciclarse, e incluso, fabricarse. ¿Qué hay más divertido que pasar un agradable rato con tu hijo creando una pieza única e irrepetible?
-Pensar dos veces antes de comprar: las compras compulsivas son una de las peores costumbres que puede tener una familia. Cuando se cree que se necesita algo, no siempre es del todo cierto. En ocasiones, al esperar un tiempo prudencial, nos damos cuenta de que no necesitamos ese producto u objeto. Enseñar a esperar a nuestros hijos puede ser clave en el desarrollo de sus hábitos de consumo.
-Y el punto más importante... ¡predicar con el ejemplo!: si tú mismo no tienes un comportamiento acorde a tus ideales, tus hijos tampoco. Los humanos aprendemos por imitación y repetición, sobre todo cuando tenemos esas edades. Así que ya sabes, ¡vete con ojo con cómo te relacionas con el mundo.
España es el país con más horas de sol de toda Europa pero, ¿realmente estamos aprovechando toda esa energía? 26/03/2020
La sociedad española es una de las más preocupadas por el alarmante fenómeno del cambio climático, y las personalidades famosas no se quedan atrás 23/03/2020