La crisis financiera de 2008 no ha dejado de atormentar a los grandes bancos estadounidenses. Pero mientras Citigroup ha saldado sus cuentas, Goldman Sachs todavía enfrenta problemas y costos elevados.

Tras mucho tiempo sin ser afectado, Goldman Sachs debe ahora enfrentar sus errores en el sector de los créditos inmobiliarios vinculados a hipotecas de alto riesgo.

Su beneficio neto en el segundo trimestre anunciado el jueves se redujo casi a la mitad, a 1.050 millones de dólares, debido a una provisión de 1.450 millones de dólares para futuros acuerdos con las autoridades.

Las reservas de Goldman Sachs se elevaban a 3.800 millones de dólares a fines de marzo.

El banco dirigido por Lloyd Blankfein negocia con las autoridades estadounidenses -entre las cuales el departamento de Justicia (DoJ)- una multa de 2.000 a 3.000 millones de dólares para evitar demandas, según fuentes cercanas al caso.

El contencioso refiere a la venta por parte del banco de títulos cuyo valor se había hundido en el momento de la crisis financiera, afectando a numerosos inversores.

Como si eso no fuera suficiente, las actividades de corretaje, una de las fortalezas tradicionales de Goldman Sachs, sufre por las incertidumbres en Europa, especialmente por la crisis griega.

Sus ingresos generados por las actividades de mercado retrocedieron 6% en un año, a 3.600 millones de dólares. Representa una caída de 34% en relación al primer trimestre.

Los ingresos por actividades de corretaje de obligaciones, divisas, tasas y materias primas (FICC) cayeron 28% debido a bajos volúmenes. Es un desplome mayor al sufrido por JPMorgan Chase (-10%) o Bank of America (-9%).

Incluso los banqueros que asesoran empresas en operaciones de fusiones y adquisiciones o introducciones en la bolsa ganaron menos dinero en el segundo trimestre, comparado al primero (-15%). En un año, los ingresos subieron de todas formas 62%.

Goldman Sachs puede consolarse con un volumen de negocios trimestral global de 9.070 millones de dólares, superior a los 8.780 millones esperados en promedio por los mercados.

- Citigroup mejora -

Por el contrario, el sol brilla de nuevo en la sede de Citigroup, tercer banco estadounidense en términos de activos.

Su beneficio neto trimestral subió a 4.840 millones de dólares, impulsado fundamentalmente por ahorros de escala y una fuerte caída de los gastos jurídicos.

Los gastos operativos bajaron 30% a 10.900 millones de dólares en el segundo trimestre. Y la cuenta jurídica fue de solo 360 millones de dólares.

El segundo trimestre de 2014, marcado por un beneficio neto de 181 millones de dólares, había sufrido una carga de 3.700 millones de dólares por una colosal multa para poner fin a contenciosos que se remontaban a casos durante la última crisis financiera.

Pero desde el inicio del año el banco parece haber saldado sus cuentas por las hipotecas de alto riesgo.

Salvo el escándalo por la manipulación de tasas de divisas, su nombre es mencionado actualmente solo en casos cuyas multas no deberían ser demasiado importantes.

Puede así concentrarse en su actividad, que aumentó ligeramente en el segundo trimestre.

El banco tuvo un volumen de negocios de 19.470 millones de dólares, en alza de 0, 23% en relación al año pasado y superior a los 19.110 millones pronosticados por el mercado.

En el sector de corretaje los ingresos bajaron en tanto 1%.

Para estimular el crecimiento mientras espera un alza de las tasas directrices del banco central (Fed), prevista para este año, Citigroup recorta costos y cede activos considerados no estratégicos.

Acaba de ceder su filial de banca minorista en Nicaragua y su actividad de préstamos al consumo, OneMain Financial.

Reduce su red de agencias y fortalece sus servicios bancarios en línea.

"No vamos a ganar la guerra de agencias", subrayó el jueves el director financiero John Gerspach, en conferencia telefónica con periodistas. "Preferimos concentrarnos en zonas urbanas".

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