Mira-flores

es un pueblo precioso, la verdad es que es un lugar encantado, sus casas que son el alma del pueblo son de diferentes colores, sus casas son de color risa y sus calles color carcajada. Es una pequeña montana y en sus laderas están asentadas las casas, todo huele a limpio, todo huele a fresco, Mira-flores es un lugar para vivir.

Aquí el reloj se detiene, haces todo lo que sueles hacer en las ciudades grandes, con la diferencia que aquí lo haces en un par de horas, lo que en una ciudad grande te lleva todo el día y cuando te das cuenta ya no tienes tiempo, pero aquí lo que sobra es el tiempo.

En Mira-flores, hay costumbres muy propias y forma parte de la vida de este pueblo. por ejemplo, aquí las personas después de la cinco de la tarde ya están en casa, las mujeres se visten como para salir a un baile, sacan su silla a la calle, a la orilla de sus casas y se preparan para ver pasar a la gente, es uno de los mejores pasa tiempos de la gente del pueblo, ver pasar y comentar o criticar.

Aquí el reloj se detiene

En el pueblo no hay fiestas los sábados, aquí todo comienza el domingo, domingo alegre.Entonces las mujeres bajan al pueblo, con sus mejores galas, faldas de ojitos almidonadas y zapatos de tacón y por supuesto la infaltable pintura de labios, a la cual los tenga más rojos y cuando se pasean por las calles comienzan los viejos a piropear, "pico rojo de mis amores", "anda, tanta carne y yo con hambre". Las mujeres no contestan, pero les gusta. Todo esto es un adorno para el pueblo, Faldas de ojitos, zapatos de tacón, colonias hechas en casa, música popular, los olores a las comidas en la calle, el domingo alegre, se pasea la cultura viviente de Mira-flores. El domingo es el único día corto en el pueblo y sus habitantes lo sabes, por eso lo viven a sorbito y despacio.